El saber cómo comportarnos juega un papel
fundamental cuando se trata de duelo. Así como existe un protocolo para
vestirse, comer e incluso hablar... También existe uno para tratar las
pérdidas. Es importante educarse en ese sentido.
El duelo es un
proceso normal, único e individual. Por ello, cada persona lo siente de
una manera diferente. Toda pérdida produce un duelo que envuelve un
proceso previo y posterior a ella. Aunque el dolor del duelo no es
lineal, es imprescindible seguir un protocolo que ayude a superar el
dolor de una pérdida.
El duelo afecta a una persona luego de una
ausencia significativa, tanto de un ser querido, de un familiar enfermo o
la pérdida de un objeto u empleo, por ejemplo. “Por lo general, muchos
afirman que el sufrimiento propio de este proceso no se puede enmendar,
pero esto, con buena ayuda de los amigos y familiares, puede superarse”,
explica la psicóloga clínica y terapeuta de duelo, Rosa Mariana Brea
Franco. Es un error tomar decisiones drásticas. El protocolo ayuda
también a saber cómo actuar cuando vamos a dar un pésame.
Tratar el duelo con niños y adolescentes Como
el duelo es un proceso individual, también en los adolescentes es un
proceso diferente. Estos no se deben excluir de las consecuencias que
trae consigo la pérdida de un ser querido. Aunque lo asimilen de una
manera diferente, tanto los infantes como los adolescentes tienen
derecho a vivir a su manera la realidad que los embarga luego de pasar
un momento difícil.
Tienen derecho a continuar con su rutina, a
salir, a jugar y a todo lo que conlleva una vida normal. Los adultos no
deben interferir en eso, pues hacer estas cosas los ayuda a hacer más
llevadera la situación.
“Generalmente, los adultos rechazan
todo tipo de celebraciones durante el proceso de duelo, decisión que no
es común en los jóvenes y niños. Pero esto no significa que no sientan
la pérdida”, explica Rosa Mariana Brea Franco, sicóloga y experta en el
tema. “El duelo es individual, y por ende se siente diferente. Por eso
es ineludible no pedirles a los otros que se comporten igual”, enfatiza
la psicóloga.
Es muy importante completar las tareas del proceso
de duelo. Hay que evitar frases como: “Sé cómo te sientes”, “no sé qué
vas a hacer ahora”, “he pasado por eso”... En el caso de los niños y
adolescentes no es recomendable decirles: “Ahora eres el hombre o eres
la mujer de la casa”, en caso de pérdida del padre o la madre.
También
hay que tener en cuenta con lo que se dice. “Él se suicidó”, por
ejemplo, no es un comentario correcto. En este último caso, la experta
en duelo recomienda decir: “Falleció a causa de suicidio”.
Sobre
las manifestaciones, Brea Franco dice que en lo que tiene que ver con lo
sicológico, hay que resaltar que los pensamientos se enfocan en las
vivencias con el fallecido. Repercuten sentimientos de tristeza, culpa,
ira con la vida, con Dios, desesperación y otros sentimientos que luego,
dependiendo de cómo sean canalizados, van tomando su ruta.
El
tema es complejo, y hay que saber tratarlo. Por esta razón, los
ejecutivos de la Funeraria Blandino insisten en que hay que educar a la
población dominicana respecto a lo que tiene que ver con el duelo. Hace
falta mucha educación al respecto. De ahí su interés en cooperar para
que, aun dentro de un momento difícil, las personas aprendan a vivir el
duelo de una manera menos traumática.
(+) UNA CHARLA EDUCATIVA SOBRE EL PROTOCOLO
Recomendaciones: Brea
Franco, autora del libro “El duelo: un camino hacia la transformación”,
dictará una charla sobre “El protocolo del duelo”, mañana en el salón
de conferencias de la Funeraria Blandino de la avenida Abraham Lincoln a
las 6:00 de la tarde.
Va dirigido tanto a padres, psicólogos terapeutas como al público en general.
